La vida perfecta y atemporal.
Soy una feliz oveja
caminando con mis compañeras,
con mi rebaño atolondrado,
hacia el desconocido fin.
Que no me importa,
no nos importa en absoluto.
Mi cerebro atrofiado parece
un dátil pasado de fecha.
Yo me agarro a un clavo ardiendo
antes que salir de esta cola
y ver la luz del mundo
y ver lo que pude haber sido.
Doy asco, todo mi rebaño
da asco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario