Respiras ausente verificando mis sospechas.
Inexplicablemente, tu conciencia está tranquila.
Me he dado cuenta, hay que ser malpensada
por muchas flores que te vendan
por mucha decoración alrededor.
Y ahora suelto carcajadas inmensas
cada vez que pienso en tus discursos
sobre mundos de Oz y utopías bien llegadas
del romanticismo más profundo.
Eres un saco de palabras de plástico
derritiendose con el calor de este verano
en el que el sol no ha conseguido cegarme,
ni tan siquiera, hacerme entrecerrar los ojos.
O lo has olvidado todo
o has probado a ver si encaja
en otro lugar-cuerpo.
Mente , me atrevería a decir ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario