28 oct 2010

El Terror.

Temblando, observo tu pasado en carne y hueso. Parece mirarme como si me conociera. Y no eres tú.
Me está caiendo encima un diluvio de recuerdos y dolores, de carcajadas y ataques al corazón. No sé como actuar teniendo a escasos tres metros tu viva imagen de hace unos años, viendo tus manos, tu boca, tus ojos... Nunca antes había visto un clon, uno de verdad. Tengo el corazón parado y roto en mil pedazos.
(Corazón roto en dos mil pedazos) Javier Corcobado me susurra al oído mientras te miro reflejado en las ventanas de este autobús de muerte.
No estoy segura de si este momento es espantoso o terriblemente bello.
Ahora tengo miedo de que te bajes en la misma parada que yo y de que seas mi vecino.

1 comentario:

marítima dijo...

eres un esquimal precioso,al igual que esto que escribes